
Mentas salvavidas durante el embarazo
Intenta consumir menos de 200 mg de cafeína al día, lo que equivale aproximadamente a un café con leche pequeño o tres cafés instantáneos. Durante el embarazo necesitas un poco más de líquido, así que sustituye las tazas de café que elimines de tu ingesta habitual por otras bebidas. Y recuerda que también puedes tomar cafeína en otras bebidas.
La idea de comer por 2 ya no existe. Durante los 3 primeros meses, no necesitas aumentar la ingesta de alimentos. Durante el resto del embarazo, sólo necesitas 2 raciones más de cereales integrales y 1 ración más de proteínas al día.
“En lugar de centrarte en la cantidad, piensa en la calidad”, dice Hazi. “Elige una buena selección de verduras y grasas saludables, como frutos secos, semillas y aguacate. Busca un poco de proteína en cada comida y muchos alimentos fibrosos, como pan integral, arroz integral y judías”.
“Sí, con algunas salvedades”, dice Melanie McGrice, dietista acreditada y portavoz de la Asociación de Dietistas de Australia. “Sabemos que las grasas omega 3 que contienen son muy importantes para el desarrollo cerebral del bebé. El consumo de pescado también está relacionado con un menor riesgo de asma.”
Menta fresca durante el embarazo
Muchas mujeres optan por tomar infusiones para aliviar los molestos síntomas del embarazo o la lactancia. Algunas infusiones son seguras durante el embarazo o la lactancia, siempre que te limites a una o dos tazas al día y consultes antes a tu médico o matrona.
Aunque las infusiones contienen ingredientes naturales, eso no significa que sean necesariamente seguras. Las cantidades de sustancias que contienen pueden variar, y también pueden contener ingredientes que no figuran en la etiqueta. Estos ingredientes pueden transmitirse al bebé o interferir con otros medicamentos que estés tomando.
La mayoría de las marcas comerciales de tisanas se consideran seguras para cualquier persona que las consuma en cantidades razonables. Las tisanas que se consideran inseguras son las que no se fabrican comercialmente, las que se elaboran con cantidades excesivas de hierbas (cantidades superiores a las que se encuentran en alimentos o bebidas comunes) y las que se elaboran con hierbas que se sabe que son tóxicas.
Algunas infusiones dicen aliviar el malestar estomacal, calmar la ansiedad, preparar el útero para el parto o ayudar a dormir. Algunos tés se preparan especialmente para el embarazo y afirman que ayudan con complicaciones como la preeclampsia y preparan el cuerpo para el parto.
Menta embarazo primer trimestre
El embarazo trae mucha felicidad y alegría, pero también te hace ser precavida y escéptica con todo lo que haces. Entre los cambios que se producen durante el embarazo, la elección de los alimentos adecuados también requiere mucha reflexión. Lo que antes podías consumir sin problemas, en esta etapa puede ser motivo de preocupación. Por eso conviene elegir con cuidado lo que se come, ya que no todos los alimentos pueden consumirse durante el embarazo. Por eso, si estás embarazada y no estás segura de consumir menta, este artículo te resultará útil. Aquí analizaremos los pros y los contras del consumo de esta hierba y te ayudaremos a tomar una decisión con conocimiento de causa. Empecemos por los beneficios de consumir menta durante el embarazo.
La menta se utiliza como alimento básico en verano en muchos hogares y es muy beneficiosa para combatir el insoportable calor estival. Posee diversas propiedades medicinales y curativas que el ser humano lleva utilizando desde hace siglos. La menta tiene un fuerte sabor aromático y se utiliza también en muchas formas culinarias. El consumo de hojas de menta durante el embarazo no supone una amenaza grave, ya que puede aportar muchos beneficios a las mujeres embarazadas. Sigue leyendo para conocer algunos de ellos:
¿Es segura el agua de menta durante el embarazo?
Cuando se trata de embarazo y remedios naturales, las hojas de menta están en lo más alto de nuestra lista. Con múltiples beneficios para la salud, las mamás embarazadas y lactantes pueden contar con la menta para algo más que dar sabor a la comida.
La menta pertenece a la familia de las lamiáceas, que incluye la menta piperita y la menta verde. También hay entre 15 y 20 tipos de otras especies de plantas que se consideran menta, lo que la convierte en una elección popular como hierba en la comida, así como en caramelos, dentífricos e incluso productos de belleza.
Las hojas de menta contienen altos niveles de fósforo, calcio y vitaminas como la C, D, E y A. Estos nutrientes mejoran el sistema inmunológico de tu cuerpo, además de protegerte a nivel celular, reduciendo el riesgo de enfermedades crónicas. La vitamina A, en particular, ayuda a eliminar los radicales libres que pueden dañar los tejidos de los órganos, reduciendo así el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer, diabetes y enfermedades cardiacas.
Los distintos tipos de plantas de menta ofrecen una amplia gama de beneficios antioxidantes para la salud, sobre todo en el caso del síndrome del intestino irritable. Algunas investigaciones han descubierto que las hojas de menta están relacionadas con la inhibición de enzimas que promueven el crecimiento de tumores.